Renault avanza en el Salón de Frankfurt las líneas maestras del futuro sustituto de su monovolumen grande, el Renault Espace. Además del diseño, el prototipo Renault Initiale también muestra una nueva versión del motor 1.6 dCi 130 con doble turbocompresor, que promete una interesante disminución del consumo.
El comunicado de prensa parece extraído de un manual de consejos para practicar una vida zen. Habla de una estrategia de diseño que recuerda a los seis pétalos del ciclo de la vida, y de vínculos con conceptos como el amor, el trabajo, la tranquilidad, la mente… Pero quédate con la imagen externa del Renault Initiale, que seguramente no cambiará mucho en el futuro Renault Espace, aunque será difícil que en Renault mantengan el sistema de apertura de puertas traseras en sentido contrario a las delanteras, y sin pilar central.
Lo que sí da una idea del tamaño del futuro Renault Espace son las dimensiones de este prototipo: 4,85 metros de largo, prácticamente lo que un Renault Grand Espace. ¿Dejará de existir el monovolumen grande de Renault en versión corta? Veremos…
El habitáculo del Renault Initiale: un salón rodante
El interior del Renault Initiale es otra cosa, se nota claramente que estamos ante un prototipo de salón. Tiene seis plazas con una configuración de dos asientos individuales en cada una de las dos primeras filas, anclados a una especie de raíl central para que parezca que están “flotando”, y una banqueta trasera formada por una especie de láminas móviles que permite adoptar distintas configuraciones.
Y no deja de resultar curioso que en Renault hayan pasado la instrumentación donde a nuestro juicio debe estar, detrás del volante, no en posición central. Ojalá se mantenga esa distribución en la siguiente generación del Renault Espace.
Nuevo motor 1.6 dCi biturbo
En cuanto a motores, el prototipo Renault Initiale aporta una novedad que probablemente veremos en otros modelos de Renault antes que en el futuro Espace. Se trata de una versión del actual 1.6 dCi de 130 CV, pero con doble turbocompresor en vez de un turbo sencillo, acoplado a la caja de cambios EDC de doble embrague. Renault no dice si se mantiene la potencia, pero sí que la cifra de par alcanza hasta 400 Nm, con un 90 por ciento de esa cifra disponible desde apenas 1.500 rpm.
También anuncia que el consumo es un 25 por ciento inferior al de un motor equivalente, aunque no aclara si se refiere sólo a la mecánica o al motor montado en el prototipo, para el que se asegura que el peso es nada menos que 250 kg inferior al de un Renault Grand Espace.
Faros LED, llantas de 22 pulgadas, cámaras de vídeo en vez de retrovisores, una pintura que cambia de tono en función de cómo incida la luz sobre la carrocería, un sofisticado equipo de sonido BOSE y un techo panoauto10rámico con un prisma especial capaz de crear diferentes ambientes luminosos en el habitáculo completan la propuesta de este original prototipo.
