La entrada de Skoda en el segmento de los compactos llega de la mano del Skoda Spaceback, al que en realidad habría que llamar Skoda Rapid Spaceback, pues a diferencia de otros compactos del grupo como el Seat León o el Volkswagen Golf, este nuevo modelo no comparte con ellos plataforma, sino que se trata de una versión “sin culo” de la berlina Rapid. De hecho, en las imágenes facilitadas por Skoda, que se refiere a este modelo como Spaceback “a secas”, aparece la denominación Rapid. Habrá que esperar a su presentación oficial en el Salón de Frankfurt a ver cómo queda la cosa.
Derivado del Skoda Rapid, pero con 18 centímetros menos de longitud, el Spaceback es la apuesta de Skoda en el segmento de los compactos.
En la trasera está la principal diferencia, pues desde el pilar central hacia delante, el Skoda Spaceback es prácticamente idéntico al Skoda Rapid. Pero acortando el voladizo trasero (se mantiene la distancia entre ejes de 2,6 metros) para quedarse en 4,3 metros de longitud (18 centímetros menos que el Rapid), y con un diseño dos volúmenes que destaca por el tercer acristalamiento lateral y por un portón de generosas dimensiones, Skoda añade a su gama una variante que competirá con los Renault Mégane, Kia ceed, Ford Focus o Citroën C4, por mencionar sólo unos cuantos, sin olvidarnos del Seat León, si bien este último realizado sobre una plataforma más sofisticada.
En el interior del Skoda Spaceback cambian algunos mandos, tapizados y diseño del volante, pero se conservan las formas del salpicadero respecto al Rapid.
Dicen en la marca que el habitáculo del nuevo Skoda Spaceback no pierde centímetros respecto al Rapid. Lógico, las diferencias están de las ruedas traseras hacia atrás. Aun así, para el maletero anuncia 415 litros de capacidad, una cifra muy buena, y superior a la media de la categoría.
La gama de motores, lógicamente, no variará respecto al Skoda Rapid, con versiones de gasolina TSI de 1.2 y 1.4 litros y potencias que irán desde los 75 a los 122 CV, más el 1.6 TDI, que al 105 CV añadirá una variante de 90 CV. En versión ecológica GreenLine, Skoda adelanta un consumo medio de 3,8 l/100 km, y unas emisiones de CO2 de 99 g/km.
Con un planteamiento más juvenil, y también algo más sofisticado que el Rapid, el Skoda Spaceback añadirá a las posibles opciones de equipamiento elementos como el enorme techo solar panorámico, y también se podrán montar faros de xenón.
