Hoy es San Antón, festividad de los animales. En un día tan señalado debemos recordar que llevar a los perros en el coche correctamente es fundamental por su seguridad, pero también para la tuya y la del resto de ocupantes.
Los perros son un miembro más de la familia y debemos preocuparnos de que viajen seguros, porque ellos dependen de nosotros. Según su tamaño, tenemos varias opciones a contemplar, todas igual de buenas.
Si tu perro es pequeño o mediano, podrás colocarle dentro de un transportín homologado a su medida en las plazas traseras. Una vez esté en su sitio y para que no se mueva, colócale el cinturón de seguridad. Recuerda: en ningún caso puede ir en el maletero.
Pero en caso de que tu perro sea de gran tamaño, es más aconsejable un arnés especial que se ajustará a su cuerpo y que se abrocha al mismo enganche del cinturón de seguridad convencional en las plazas traseras. Podrás comprarlo perfectamente en cualquier tienda de mascotas o en las clínicas veterinarias, como el transportín.

Ejemplo de rejilla separadora para el coche
También existen otros sistemas, como las redes y barras separadoras, que se ponen tras los asientos delanteros para evitar que los perros pasen a la parte delantera del coche, e incluso pueden instalarse en algunos vehículos otros sistemas especiales con el objetivo fundamental de evitar el peligro que supone que vayan los animales sueltos por el coche.
Todo esto está contemplado en nuestro actual Reglamento de Circulación, en el artículo 18.1. No cumplir con la normativa supondrá al infractor una multa económica inicial de 100 euros.
Según el tamaño, cada perro necesita un sistema de seguridad adecuado para el coche