Lo tienes "chungo" si quieres hacer algo que de verdad se note sin comprometer la longevidad mecánica ni gastar mucho dinero.
Tu coche tiene un motor 2.5 de 4 cilindros (había un 2.8 de 125 CV) con inyección indirecta, turbocompresor e intercooler. La opción más sencilla es aumentar muy ligeramente la presión de soplado del turbocompresor y "tocar" un poco la inyeccción. Aunque gastará más ganarás algo de potencia, pero como te digo, si el motor está ya un poco "currao", puedes acortar lo que le quede de vida. Si te quieres meter en más complicaciones, también puedes montar un intercooler más grande.