
La marca de deportivos Aston Martin y el constructor de monoplazas de Fórmula 1 Red Bull se han asociado para crear un nuevo superdeportivo denominado AM-RB 001. Se trata de un superdeportivo sin concesiones, con un V12 atmosférico con una relación peso/potencia de 1 kg/CV, aunque aún no han indicado la potencia o el peso del coche –calculamos que sobrepasará por poco los 1.000 kg y por lo tanto los 1.000 CV-. Es un biplaza con chasis y carrocería de fibra de carbono y se producirán entre 99 y 150 unidades con un precio que rondará los tres millones de euros. Las primeras unidades se entregarán en 2018.
El coche ha sido diseñado en colaboración entre Adrian Newey, jefe técnico de Red Bull F1 Team, el diseñador de Aston Martin Marek Richman y el jefe de Special Operations de Aston Martin. Newey, el diseñador más exitoso de la historia de la F1 pone por primera vez su conocimiento en un coche de calle. Se ha encargado de que la aerodinámica sea tan efectiva como en un F1, pero ha trabajado sobre todo en el flujo de aire bajo el coche, dejando a Richman crear una bella carrocería sin muchos aditamentos o alerones.

Según han comunicado el coche de dos plazas será confortable en carretera, pero una máquina increíble en circuito. Los ocupantes tendrán una postura cercana a la de un cockpit de F1, con los pies colocados más arriba que la cadera. De hecho, se ha anunciado que tendrá una serie importante de nuevas soluciones y primicias respecto a la colocación de los elementos dentro del vehículo, sobre su eficiencia y sus prestaciones.
Una versión sólo para circuito está en desarrollo y se espera que consiga tiempos por vuelta comparables a los prototipos LMP1 que corren en las 24 Horas de Le Mans. Esta versión estará limitada a 25 unidades.

El motor se parecerá al usado por el Ferrari LaFerrari en el hecho de que será un V12 atmosférico ayudado por un sistema híbrido tipo KERS, basado en el que usan los Fórmula 1. El motor V12 será nuevo y no está basado en el usado en el superdeportivo Aston Martin One-77.