El nuevo Chevrolet Captiva es sólo una de las cuatro primicias mundiales que Chevrolet tiene preparadas para el Salón de París, junto al Chevrolet Aveo, del que ya te hemos hablado; el resto, en breve.
De momento, aquí tenemos las primeras fotografías del nuevo Chevrolet Captiva, donde, a falta de un interior, ya se pueden apreciar los cambios más importantes. Se trata, sin duda, de una actualización de la imagen del SUV de Chevrolet, “primo-hermano” del Opel Antara, y que lleva en nuestro mercado desde el año 2006.
Lo más relevante a simple vista es la nueva parrilla con el frontal característico en los últimos modelos de la marca. También son nuevos el capó, los grupos ópticos, los intermitentes con diodos LED integrados en los retrovisores… Como suele ser habitual cuando una marca renueva un modelo, se añaden nuevos colores de carrocería, y también nuevos diseños de llantas, que irán desde las 17 hasta las 19 pulgadas. Y
El Captiva seguirá ofreciendo un interior con 5 ó 7 plazas, aunque Chevrolet ha aprovechado la ocasión para añadir elementos de equipamiento que hasta ahora no estaban presentes, y que ya son habituales en la categoría. Entre ellos, destaca el freno de mano eléctrico, sistema de audio con entradas USB y Bluetooth, navegador con pantalla táctil o cámara trasera para la ayuda al aparcamiento.
Se han revisado las suspensiones para mejorar el comportamiento en carretera (suponemos que con amortiguación un poco más firme), y todas las versiones llevarán ESP de serie, y función “Hill Start Assist” para la ayuda al arranque en pendiente. Todos los motores se ofrecerán tanto con tracción delantera como con tracción a las cuatro ruedas, salvo el más potente, que sólo se ofrecerá con tracción total.
Nuevos motores diesel de 2,2 litros
Precisamente aquí, en la gama de motores, es donde encontramos algunas de las novedades más interesantes, aunque Chevrolet también anuncia que las cajas de cambios, tanto la automática como la manual, serán de nuevo desarrollo.
El actual 2.0 VCDI, disponible con 127 y con 150 CV, deja paso a un nuevo 4 cilindros de 2,2 litros, que se desdoblará en dos variantes de potencia, con 163 y 184 CV. Todavía no tenemos datos de prestaciones, pero Chevrolet afirma que tendrán el equilibrio esperado entre rendimiento y consumo.
En gasolina, el 2.4, ahora con distribución variable, pasa a ofrecer 171 CV. El tope de la gama seguirá siendo un V6, pero con 3.0 en vez de 3,2 litros, y con 258 CV en lugar de 230.
