El Gobierno ha aprobado el Plan PIVE (Plan de Incentivos al Vehículo Eficiente) que entrará en vigor el próximo 1 de octubre. Este Plan contempla una ayuda de 2000 euros y a cambio se deberá entregar un coche de más de 12 años para achatarrar.
( Auto10 )También podrán beneficiarse de las ayudas los coches eléctricos, híbridos o híbridos enchufables. En el caso de los eléctricos e híbridos enchufables se elimina el tope de precio de 25.000 euros.
Muy importante es que sólo podrán acogerse al Plan Pive aquellos usuarios que entreguen para achatarrar un turismo con una antigüedad de más de doce años o una furgoneta con una antigüedad de más de diez años.

El plan contará con una dotación presupuestaria de 75 millones de euros y estará vigente hasta el 31 de marzo de 2013 o hasta que se acaben los fondos. La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha destacado que el plan permitirá retirar 75.000 vehículos antiguos con altos consumos y emisiones, así como ahorrar 26 millones de litros de carburante, 160.000 barriles de petróleo, 35.000 toneladas de CO2 y, en términos económicos, 16 millones de euros.
El último plan de ayudas a la compra de coches que puso en marcha el anterior ministro de Industria, Miguel Sebastián, el Plan 2000E supuso un respiro para el sector. Según Anfac, la patronal de los fabricantes, contribuyó a que en 2009 se conservaran 30.000 empleos en el sector del automóvil. El Plan 2000E contemplaba ayudas de 500 euros por parte de la Administración, otros 500 de las Comunidades Autónomas y 1000 del fabricante.
Qué coches entran en el Plan Pive
El abanico de coches nuevos que pueden beneficiarse del nuevo Plan Prever es más extenso de lo que parece al leer las condiciones. Además de todos los coches eléctricos, de autonomía extendida e híbridos, prácticamente cualquier coche diésel de menos de 2 litros de cilindrada y que cueste menos de 25.000 € antes de impuestos entra en el plan, ya que la gran mayoría no supera los 160 g/km de CO2. Incluso coches turbodiesel de hasta 2,5 o 3 litros tienen homologados menos de 160 g/km de CO2, pero normalmente superan los 25.000 €. Entre los gasolina cabrían prácticamente todos los coches utilitarios y compactos –y alguna berlina media o monovolumen- con motores de última generación. Es decir todos estos motores de baja cilindrada turboalimentados normalmente hasta 1,6 litros, con potencias de hasta 140 o 180 CV.
Coches tan dispares como el Opel Ampera de más de 40.000 € por ser de autonomía extendida y enchufable, como el monovolumen de gasolina de siete plazas Ford Grand C-Max 1.6 EcoBoost de 150 CV, o el SUV Land Rover Freelander 2 eD4, o la berlina de tamaño medio turbodiésel Renault Laguna Energy dCi 130, entran en el plan. Y por su puesto, cualquier utilitario del segmento B (Corsa, Fiesta, Ibiza, Punto, Clio…) mientras no sea deportivo de altas prestaciones o compactos no premium (León, C4, 308, Focus, Astra, Mégane…) entra en el plan.
Los coches tienen que ser comprados en concesionarios adheridos al Plan Pive, esta lista se puede consultar en la web del IDAE.
Podéis consultar todos nuestro artículos sobre el Plan 2000E en nuestra sección de especiales.
