El RACE hará informes independientes para los vehículos de ocasión, con el objetivo de mejorar la confianza de compradores y vendedores.
El mercado de ocasión espera vender en 2015 más de un millón seiscientos mil coches. Por ello, el RACE quiere mejorar los derechos de aquellos usuarios que deseen comprar o vender un VO, a través de informe independiente en el que se certifica el estado real del vehículo. Aproximadamente, el 62% de las operaciones se hacen entre particulares que no están obligados a responder ante un problema. Ahora, el RACE protegerá a los usuarios con garantía. Así, se pretende eliminar las inseguridades que padecen muchos compradores a la vez que se puede determinar el estado real del vehículo.
Esta certificación del RACE, que se basa en un informe realizado por profesionales independientes se hace in situ. Así que para aquél que desee certificar el estado del vehículo a vender o comprar es muy cómodo. En el análisis, se comprueban los elementos tanto estéticos, como mecánicos, de seguridad, de mantenimiento, y documentación.
Por último, el evaluador hará una prueba dinámica. Con todos los datos, pasará a clasificar al vehículo mediante “volantes RACE”, que representarán categorías de calidad. Cinco volantes muestran un estado del vehículo “excelente”, cuatro será “notable”, tres, “bueno”, dos “correcto” y sólo un volante será “aceptable”. El peor de los casos es un volante rojo, que significa que el vehículo es “no certificable”. Es decir, no supera la revisión está en mal estado y no es seguro para circular debido a defectos graves. Cada informe emitido por los profesionales que trabajan para el RACE, tendrá un número de registro asociado a la matrícula del vehículo para garantizar su autenticidad.