El SUV más grande de BYD adapta su diseño al resto de la gama, manteniendo su configuración de siete asientos y con 130 km más de autonomía eléctrica.

No hace ni un año que se presentó el BYD Tang en nuestro país y ya va a ser renovado. No vayas a pensar que los ingenieros chinos tenían mucha prisa en renovar a su SUV de representación, pero tendrás que leer un poco más abajo para que te cuente más detalles. Y se ha desvelado en el último Salón de Ginebra, donde el fabricante ha presentado varias novedades importantes.
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La explicación a este cambio tan repentino es que el BYD Tang que llegó a nuestro país se había lanzado en China en 2018 y tuvo una renovación en 2021. Ahora el modelo al que damos la bienvenida data de 2022 y seguramente esté ya rodando por nuestras carreteras a finales de este mismo año.

Y aunque los faros son bastante parecidos, es un cambio bastante notable el que encontramos en el frontal de este BYD Tang. Para empezar, su diseño se acopla al resto de la gama del fabricante asiático, con esa línea cromada que va de lado a lado y sobre la que se asienta el logo de la marca. Y se culmina con un toque en color gris en su zona más baja para darle aspecto campero.
El lateral del BYD Tang, como suele pasar en este tipo de renovaciones, no se ha modificado, aunque son de nuevo cuño las llantas carenadas con las que se presentó en Ginebra. Y en la zaga han sido pequeños detalles, como la nueva colocación de los catadióptricos, las nuevas formas del paragolpes o que se haya sustituido la frase “Build your dreams” por sus siglas BYD en la zona baja derecha.

De cara al extenso interior con hasta siete plazas de este BYD Tang se han realizado también pequeños retoques. Como vemos en su salpicadero, se ha aprovechado esta renovación para incorporar una pantalla multimedia de mucho más tamaño ya que llega a 15,6 pulgadas (2,8 más), que de paso estrena un nuevo sistema operativo.
Nos quedaría hablar de la parte eléctrica de este nuevo BYD Tang. La configuración mecánica se mantiene, con un motor en el eje delantero de 180 kW (245 CV) y otro en el trasero de 200 kW (272 CV), para una potencia total combinada de 380 kW (517 CV). Pero ahora lo que se ha hecho es montar una batería de mayor capacidad que alcanza los 108,8 kWh (antes eran 86,4 kWh) lo que repercute en que la autonomía crecerá en 130 kilómetros para establecerse en 530 kilómetros.
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