El Ford Focus languidece, pero el nuevo Focus ya está vivo. Este Ford Focus RS500 no es otra cosa que una celebración, un acto de agradecimiento a los servicios prestados, una nueva efímera juventud para brillar con más fuerza que nunca, con la experiencia que dan los años, los millones de kilómetros completados, y la infinidad de carreras, y algunos títulos conseguidos en el Mundial de Rallyes. El RS500 es una serie limitada de solo quinientas unidades, numerados y bien diferenciadas por su estética y una mecánica retocada, amén de un nombre de leyenda forjado en las carreras de turismos de otro tiempo, de otro RS500, del Ford Sierra, que añadía a su denominación otra de incuestionable prestigio, Cosworth.
La base del Focus RS ya es lo suficientemente salvaje como para que sean suficientes pequeñas modificaciones con las que crear un coche tan especial como este RS500. El motor, el cinco cilindros turbo de dos litros y medio que en algunos productos de Volvo puede resultar incluso percherón, en el Focus RS, más ligero, es explosivo, y en el RS500 gana un quince por ciento de potencia alcanzado los 350 CV. Y tiene que ser salvaje.
Para los ingenieros de Ford habría sido tan fácil como apretar un poco el turbo y listo, pero en lugar de esto han querido hacer bien las cosas mejorando la entrega de potencia a medio y alto régimen sin perjudicar la progresividad en la respuesta a bajas revoluciones. En total son cuarenta y cinco los caballos ganados, que se consiguen a 6.000 rpm, mientras que el par se incrementa hasta los 460 Nm, estando disponible al cien por cien desde las 2.500 a las 4.500 rpm.
Para conseguirlo, un selecto grupo de ingenieros del Ford Team RS ha modificado el motor RS500 del Focus trabajando además en la respiración del motor y la combustión. El intercooler es de mayor tamaño y capacidad, y en la salida de los colectores y el escape se ha aumentado el diámetro, y todo ello con una actualización completa de la electrónica. Esto permite al exclusivo y radical Focus RS pasar de 0-100 km/h en 5,6 segundos, con una velocidad máxima de 263 km/h.
Hablando y estudiando este coche más de uno apuntaba que resulta una locura dotar de semejante potencia a un coche de tracción delantera. Y no le falta razón. Atrás quedaron los míticos Sierra RS500 de tracción trasera, o los más recientes Escort Cosworth de tracción total. Pero sin duda el Focus es un digno heredero de aquellos. Hoy es la electrónica y la eficacia de la suspensión la que suple, como puede, las carencias de uno u otro chasis. Así, el Focus RS tiene quizás el mejor chasis de tracción delantera de su categoría. Quizás incluso de cualquier categoría. Capaz de digerir semejante potencia por medio de su suspensión independiente y multibrazo, y por supuesto gracias al imprescindible diferencial de deslizamiento limitado de la marca Quaife, que obra milagros, aunque todo hay que decirlo, el piloto/conductor también debe poner un poco de su lado y pensar en las ruedas, en su desgaste y degradación, casi como lo haría un piloto de F1 o del mundial de Rallyes.
Los ingenieros del Ford RS Team pusieron a prueba el RS500 en el circuito de Nürburgring, donde tres pilotos de Ford se alternaron al volante de un prototipo de RS500 para completar 10.000 kilómetros sin parar, lo que equivale a completar diez 24 Horas de Nürburgring sin interrupción. No hubo graves problemas de fiabilidad tras 500 vueltas a sin parar a Nürburgring, y además a un ritmo sensacional que le situaba en los ocho minutos por vuelta… entre los mejores de su categoría.
Espectacular por los cuatro costados, con el llamativo color negro mate como color único y exclusivo del RS500, el coche llama poderosamente la atención por sus imponentes llantas de 19 pulgadas con neumáticos de 235 mm en perfil 35, que dejan ver las pinzas de freno pintadas en color rojo, un alerón trasero de doble hoja más propio del mundial de rallyes que de la carretera, y un difusor trasero que para sí quisiera más de un GT de carreras. Todo ello y una musculosa silueta da forma a un coche redondo del que solo se fabricarán quinientas unidades para todo el mundo.
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El RS500 marca el final de la producción de la actual generación de Focus RS. El último vehículo saldrá de la fábrica de Ford de Saarlouis en Alemania en septiembre de 2010. Los RS500 se harán en la misma planta en mayo, solo 500 vehículos, que serán destinados a los veinte mercados europeos. Cada RS500 llevará una placa de metal en la consola central, grabado a mano con un número único de identificación 001-500.
FORD FOCUS RS500
Rendimiento
0-100 km/h 5.6 seg.
Velocidad máxima 265 km/h
Potencia máxima 350 CV a 6.000 rpm
Par máximo 460 Nm a 2.500-4.500 rpm
