La firma británica anuncia en qué momento presentará su último modelo con motores convencionales y el año en el que se centrará, únicamente, en la producción de coches eléctricos.
Las marcas han comenzado a poner fecha límite a la producción de coches de combustión. Ya lo hizo Jaguar, como os contamos aquí, para después ser seguida por Ford o Volvo. Ahora, se suma una nueva firma a este ‘efecto dominó’ eléctrico: Mini. La firma británica, del Grupo BMW, presentará su último coche con motores convencionales en 2025 para fabricar únicamente coches eléctricos a partir de 2030.
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La información, publicada por el medio alemán Der Spiegel, deja clara la estrategia del Grupo BMW, que ya había anunciado que para finales de 2022, cada una de sus plantas de producción tendría al menos un coche eléctrico en camino. El acelerón de Mini para producir únicamente esta clase de coches daría sentido a esta afirmación, a la par que BMW presenta y lanza su gama 100% eléctrica.
El Mini SE 100% eléctrico, recientemente renovado, sería la primera piedra de este ambicioso proyecto. Para 2027, la firma quiere que la mitad de sus ventas sean exclusivamente de coches eléctricos, una tarea que servirá para ver la acogida de la nueva Mini 100% eléctrica de cara a su transformación final en 2030.
Quizá, de no lograrse el objetivo marcado, a la firma británica no le quede más remedio que postergar el cese de la producción de vehículos de combustión a la espera de encontrarse un mercado más maduro y predispuesto a dar el paso a los coches 100% eléctricos. Pero entendemos que en una década y observando el crecimiento de los coches eléctricos a pasos agigantados, Mini tiene bien medido su futuro éxito.
Hasta que llegue 2027, habrá que estar muy atentos al desarrollo de Mini como marca 100% eléctrica, especialmente su progreso a la hora de alcanzar sus objetivos. Desde luego, quedan seis años para aquello y 9 para conocer el nuevo enfoque de la firma británica.