Este tipo de medicinas provocan efectos secundarios como somnolencia, que pueden afectar al desarrollo normal de la conducción.

No están siendo estos meses de mucho frío en algunos puntos de nuestro país, pero con la llegada del invierno es normal que el número de contagios por gripe se dispare, sólo tienes que fijarte en la cantidad de anuncios sobre antigripales que se concentran en esta época. Muchos conductores se los toman aún sin saber que eso les afectará una vez estén en carretera. Te explicamos el porqué.
Al igual que pasan con los antialérgicos, los antigripales son medicamentos cuyos efectos secundarios provocan una disminución de la reacción ante imprevistos y provocan somnolencia. Por ello, son los causantes de muchos accidentes a nivel mundial.
Todos estos condicionantes sobre las personas vienen provocados porque este tipo de medicamentos actúan como depresores sobre el sistema nervioso central, modificando condiciones sensoriales y psicomotoras.

Como consejo, y esto vale para todos los medicamentos del mercado, si necesitas tomar alguno por enfermedad es recomendable que busques el siguiente dibujo de la “señal de tráfico”. Su intención es que leas el prospecto para que no mezcles medicamentos y conducción si existe peligro. Y si por fuerza mayor necesitas desplazarte a algún lugar, siempre tendrás como opción el transporte público o los taxis.