A partir de septiembre estará a la venta el nuevo coche híbrido de BMW basado en su Serie 3, el BMW ActiveHybrid 3. El precio actual es de 56.900 euros, pero cambiará cuando se inicie la comercialización al estar vigente el nuevo IVA al 21%. Con este modelo, BMW añade un híbrido en una categoría del mercado en la que no tiene rivales, pues las berlinas híbridas de Audi, Mercedes, Lexus o Infiniti son más grandes.
¿Caro o barato? Pues teniendo en cuenta que la potencia máxima del sistema híbrido es de 340 CV, y que el BMW 335i Automático de 306 CV sobre el que se basa cuesta 6.000 euros menos, en principio le sucede lo que a casi todos los coches híbridos del momento: será difícil llegar a amortizar la diferencia de precio sólo con el consumo. El 335i tiene un consumo medio homologado de 7,2 l/100 km, por 5,9 l/100 km en el híbrido, que con más potencia –y también más peso, unos 135 kg adicionales–, incluso mejora unas décimas las cifras de aceleración: alcanza los 250 km/h, y pasa de 0 a 100 km/h en apenas 5,3 segundos.
Claro que el 335i no proporciona esa “experiencia de conducción híbrida” que muchos empiezan a valorar a la hora de conducir por ciudad, donde según BMW, el ActiveHybrid3 puede recorrer hasta 4 km en modo eléctrico si se mantiene una velocidad media de unos 35 km/h; la velocidad máxima en modo eléctrico es de 75 km/h.
El sistema híbrido del BMW ActiveHybrid 3 utiliza el motor de 6 cilindros en línea Twin Power Turbo con 306 CV acoplado a un motor eléctrico de 55 CV, que se alimenta de una batería de iones de litio situada en el maletero, lo que resta unos 90 litros de capacidad para el equipaje respecto al Serie 3. El conductor puede seleccionar distintos programas de conducción: Confort, Sport, Sport+ y ECO PRO. En función del programa elegido, y para favorecer el consumo, el motor puede desacoplarse de la transmisión y desconectarse, para reducir rozamientos y ahorrar energía, una función que cada vez es más usual en los coches híbridos.
Una característica que también empezaremos a ver en coches de este tipo es la integración del sistema de navegación con la conducción. En función de los datos del navegador, es posible que el sistema se anticipe al perfil de la carretera para activar el funcionamiento de los propulsores eléctrico y térmico buscando la mayor eficiencia.
En mi opinión, no tiene mucho sentido un coche híbrido como el ActiveHybrid3. El 335i ya tiene una fuerza descomunal como para no necesitar de la ayuda de un motor eléctrico al acelerar, y si vas a hacer mucha ciudad, no necesitas un coche con casi 350 CV. Cierto que tiene mérito mejorar las prestaciones del 335i y rebajar el consumo, pero… ¿a qué precio? A ver cuándo empezamos a ver versiones híbridas más asequibles, realizadas sobre la base de motores más “populares”, como podría ser, en el caso del BMW Serie 3, sobre un 320i o, por qué no, sobre un 318d. Seguiremos esperando.
Galería de fotos BMW ActiveHybrid 3
