Este fin de semana, Rolls-Royce presenta en casa dos versiones especiales de sus modelos estrella, vestidas de riguroso negro.

El Rolls-Royce Ghost y el Rolls-Royce Wraith ambos en su edición especial Black Badge que podrán verse este fin de semana en Goodwood, están pintados del color Black Badge Black, una pintura compuesta de varias capas y laca que están pulidas a mano y que crean un efecto de negro intenso.
En cuanto al Rolls-Royce Wraith Black Badge, lleva un motor V12 de 6.6 litros de 632 CV de potencia y 70 Nm extra de par motor, llegando a alcanzar los 869 Nm. Estrena caja de cambios y suspensión neumática. En el interior, también impera el negro a juego con el rojo Mugello. Las molduras son de aluminio y fibra de carbono, mientras que en los tapizados encontramos el logo Black Badge ‘Unlimited’.

Por su parte, el Rolls-Royce Ghost Black Badge alcanza los 610 CV y logra 60 Nm más de par motor. También estrena caja de cambios automática de ocho velocidades revisada. En el interior, impera el azul Cobalto a juego con el negro.
Las dos versiones especiales lucen nuevos logos de la doble erre en unas llantas específicas de fibra de carbono y 21 pulgadas especialmente llamativas. La parrilla, los marcos de las entradas de aire, o los escapes que en las versiones de producción son cromados, en estas dos versiones, también son de color negro.