Hoy se ha colocado la primera piedra de la que será la nueva fábrica de Volkswagen en China. El lugar escogido ha sido Changsha, en la provincia de Hunan, que se encuentra en el centro-sur del país asiático.
Esta nueva planta se construye con la colaboración con la joint venture china Shanghai-Volkswagen (SVW), con la que el grupo alemán ya tiene otras tres fábricas en Shanghai, Nanjing, Yizheng. Próximamente, y bajo la estrategia “Go West” se construirán otras plantas en Ningbo y Urumqi.
El objetivo de Volkswagen con su nueva planta es ampliar la capacidad de producción en suelo chino hasta los cuatro millones de vehículos anuales en 2018, para satisfacer la demanda del mercado local. En Changsha concretamente se producirán 300.000 vehículos anuales cuando se inaugure en el año 2015.
Las instalaciones tendrán producción con taller de prensado, taller de carrocería, taller de pintura y línea de montaje final. Todo ello dando prioridad a la reducción de consumo de energía, agua, emisiones de CO2, disolventes y residuos, en línea con el programa “Think Blue. Factory”.
Volkswagen también tiene otra joint venture en China con FAW-Volkswagen, compartiendo las fábricas de Changchun y Chengdu, y la futura de Foshan. En todas estas fábricas salen un total de 30 modelos de las marcas Volkswagen, Skoda y Audi.
