Prueba: Citroën Berlingo XTR, para gente sin prejuicios

¿Una locura? ¡Ni mucho menos! Una compra inteligente. Parece ser, por lo que nos cuentas, que lo necesario para tener un Citroën Berlingo XTR como alternativa al monovolumen tú lo tienes: falta de prejuicios.

El Berlingo XTR es amplio –más que cualquier coche de su longitud–, cómodo –el ruido no es un problema, y las suspensiones tampoco– barato de comprar –más que un monovolumen, como ya has podido comprobar– y también barato de mantener. Las prestaciones no son excepcionales, pero salvo si te gusta ir rápido o vas a circular a menudo a plena carga, cumplen de sobra, aunque te aconsejo la versión de 110 CV. La velocidad máxima es de 172 km/h, acelera de 0 a 100 en 12 segundos, y tiene un consumo medio de 5,3 l/100 km.

Vídeo del Citroën Berlingo XTR

Analizado como monovolumen el Berlingo más lujoso, el XTR en su versión Plus cumple bien en todos los aspectos, sobre todo si eliges la configuración de 7 plazas (unos 2.000 euros), que además de los dos asientos traseros cambia la configuración de banqueta trasera partida de la segunda fila por tres asientos individuales que permiten todo tipo de regulaciones. Desde luego la accesibilidad y la capacidad para su tamaño es destacable, lo que resulta lógico. Puedes acceder a la tercera fila desde las puertas laterales correderas, que son toda una ventaja, o desde el maletero, con un portón trasero que en esta versión lleva luneta practicable. ero sorprende más su acabado, su equipamiento y algunas soluciones ingeniosas. El aspecto del interior del Citroën Berlingo, su ajuste y el nivel sonoro permiten la comparación con muchos monovolúmenes. Lo mismo sucede con el equipamiento, que puede contar todo lo “razonable” incluido un equipo de música, Bluetooth, navegador…



En el interior, además de un maletero descomunal (680 litros en configuración cinco plazas, una auténtica pasada), podrás optar a soluciones prácticas como unas barras transversales en el techo que te permitirán llevar objetos largos (como tablas de surf, por ejemplo) sin necesidad de usar una baca o las barras exteriores. También hay huecos muy útiles para dejar objetos repartidos por todo el habitáculo. Y hasta existe una opción de techo acristalado. En cuanto a su utilización como “todocamino”, además de su personalización estética las versiones XTR llevan suspensión elevada 10 milímetros, protección de bajos, sistema de ayuda al arranque en pendiente, y por 624 euros puedes equipar el más que recomendable sistema Grip-Control, el mismo que estrenó el Peugeot 3008, un control de tracción con distintos modos de funcionamiento según el tipo de terreno por el que se circula.

Sólo delatan los orígenes “industriales” del Berlingo una postura de conducción muy erguida, cómoda, pero poco corriente en un monovolumen, que suele contar con asientos algo más tendidos. Y entre lo que destaca, su comportamiento, que hemos tenido ocasión de comprobar recientemente: frena bien, pero el paso por curva es casi de deportivo, ayudado por unas suspensiones firmes son tarados pensados para aguantar la carga, pero que funcionan muy bien a plena carga y casi de vacío.



Conclusión: pruébalo si puedes, pero si ya te has fijado en el Berlingo y no te importa que algún listo llame “furgoneta” a tu coche, te adelanto que es una opción razonable y una compra inteligente.

PRECIOS CITROÉN BERLINGO XTR

• HDI 90 XTR:                         16.904 €


• HDI 90 XTR Plus:             17.705 €


• HDI 110 XTR:                        18.594 €


• HDI 110 XTR Plus:            19.135 €

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