¿Todas las furgonetas de Stellantis son iguales? Aquí van sus principales diferencias

Aunque comparten una misma plataforma, las furgonetas de Stellantis tienen las suficientes diferencias como para tener que dudar cuál es mejor para ti.

Stellantis se ha posicionado como líder en el mercado de vehículos comerciales durante 2024. Esto ha sido posible en parte gracias a una gama muy completa con modelos en todos los segmentos, incluido el B, el de los coches urbanos, con las variantes comerciales del Peugeot 208 y el Citroën C3. Entre los furgones más grandes podría ser más difícil encontrar diferencias más allá de las peculiaridades estéticas ¿de verdad cambian tanto?

Cada furgoneta tiene algo que la hace única

Tomamos como ejemplo las Citroën Berlingo, Fiat Dobló, Opel Combo y Peugeot Rifter. Todas ellas se crearon en base al mismo proyecto, en sus inicios de nombre ‘K9’ en el que una de las piezas clave era la fábrica de Stellantis en Vigo, España.

Bajo la misma plataforma, las cuatro marcas comercializan cada una un modelo propio para competir en el segmento de los vehículos comerciales de tamaño medio o compacto. Algunos rivales son la Renault Kangoo, la Ford Tourneo Courier o la Volkswagen Caddy.

Seguimos con las similitudes porque todas estas furgonetas Stellantis pueden equipar un motor diésel 1.5 litros de 100 CV y cambio manual o de 130 CV y cambio automático de 8 velocidades. También cuentan con una variante 100% eléctrica de 100 kW (136 CV) de potencia cuya autonomía aumenta hasta los 344 km.

Uno de los aspectos más importantes de una furgoneta: el espacio de carga. La capacidad de la zona de carga no varía de un modelo a otro y tampoco el acceso al interior que se hace a través de doble puerta trasera o portón convencional, según configuración, además una de puerta lateral deslizante, ¿dónde reside entonces la gran diferencia?

La clave: el equipamiento único

Cada marca del grupo Stellantis se caracteriza por una cualidad única. Citroën presenta una comodidad superior al resto gracias a los asientos Advanced Comfort con los que cuenta el nuevo Berlingo. El acolchado de espuma de alta densidad de 15 mm de espesor ofrece un confort dinámico óptimo y una sujeción reforzada. Como parte del equipamiento opcional, los asientos pueden incluir ajuste lumbar eléctrico, calefacción y masaje. Además es el único que se vende con el motor 1.2 de gasolina y 100 CV de potencia.

 

Peugeot se distancia del resto con la Rifter y la Partner a través de una postura al volante única gracias al Virtual Cockpit. Con esta configuración la información de la conducción se consulta por encima del aro del volante, como en el resto de modelos de la gama del fabricante francés. El propio volante es más pequeño, va situado más abajo y también está achatado tanto en la parte superior como inferior.

 

Opel marca la diferencia por su tecnología aplicada a los faros Intelillux, de Led y adaptativos con tecnología matricial. Este sistema permite guíar el haz de luz evitando deslumbrar a los conductores de forma automática.

Por último, Fiat por su modularidad. Bajo el nombre Magic Cargo se presenta una solución para llevar objetos algo más largos. Con capacidad para hasta 3,44 m de longitud, una pequeña trampilla amplía el espacio de la zona de carga hacia el puesto de conducción en la zona del pasajero. El asiento se reclina completamente y deja un espacio plano.

Entre el equipamiento de serie u opcional de cada modelo comercial también se encuentran aquellos propios de cada marca que los hacen únicos. Es por eso que deberías tener en cuenta cuál es la característica que más se ajusta a tu estilo de conducción y tus preferencias.

La clave es comprobar cómo es ponerse al volante de cada una de las opciones. La estrategia se enfoca en ofrecer una conducción adaptada a cada usuario y es que estas leves diferencias pueden ser decisivas para decantarse por una o por otra.