He oído que se están buscando sistemas alternativos al cinturón de seguridad, ¿Seguiremos utilizándolo dentro de 10 años?
( Torrelodones, Madrid )
Claramente sí, aunque probablemente con un aspecto diferente. Volvo está celebrando su 50 aniversario desde la invención del cinturón de seguridad de tres puntos. Su inventor fue el ingeniero sueco Nils Bohiln en 1958 y fue en el 59 cuando se patentó y empezó a utilizarse en el modelo Amazón 120. Recientemente, Volvo ha dado un paso más y ha presentado un prototipo de lo que sería su versión de cuatro puntos. La principal ventaja es que sujeta al ocupante con mayor eficacia aunque también tiene inconvenientes como que no resulta demasiado cómodo. Yo creo que es una simple cuestión de adaptarse ¿no?.
De todas formas, y ahí están las estadísticas, ni de tres, ni de cuatro, continuamos sin ponernos el cinturón. En algunos medios he podido leer y escuchar que este problema se soluciona con más campañas de publicidad y vigilancia. No sólo con esto. Las campañas de publicidad con el tiempo se olvidan y la vigilancia y la persecución tampoco dan los resultados deseados. En mi opinión, sólo por el convencimiento se cambia una actitud y aquí, la educación juega un papel primordial. No caeré en el error de decir que las medidas que he citado no sirvan para nada, pero si no se complementan con una buena educación desde la infancia poco va a cambiar. Conozco algunos casos en los que los propios niños son los que instan a los padres a ponerse el cinturón. Toda una lección.
Además, tampoco entiendo muy bien que se excluya de esta norma a ciertos profesionales, justo los que tendrían que dar ejemplo.
El cinturón de seguridad es eficaz por dos razones: evita que el ocupante se golpee en el interior del coche y que salga despedido en caso de accidente. Mucho se ha oído sobre este último punto: “se quedó atrapado con el cinturón y….” Este argumento es insostenible: si el ocupante sale disparado golpea violentamente contra el suelo y además corre el peligro de poder ser aplastado por el propio coche u arrollado. Pero no vale sólo colocarse el dispositivo: hay que hacerlo bien, colocando la banda inferior sobre la cadera, no sobre el abdomen y sobre todo, en todas las plazas del vehículo. En este caso la famosa frase de “póntelo, pónselo” viene de perlas.