Si echas el freno de mano y aun así tu coche decide que es buen momento para seguir moviéndose, tendrás que echar un vistazo al freno de mano y puedes incluso tensarlo, con herramientas de “andar por casa”.

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¿Por qué se afloja el freno de mano de tu coche?
La razón es por el uso, no tiene por qué ocurrir una avería. El uso continuado, el desgaste del sistema de frenado o incluso los cambios de temperatura pueden hacer que el cable del freno de mano pierda tensión. Esto provoca que la palanca tenga demasiado recorrido y que las ruedas traseras no queden completamente bloqueadas, especialmente en coches con freno de mano manual (de palanca).
Cómo saber si tu freno de mano está flojo

- La palanca sube más de lo habitual (más de 6-8 clics).
- El coche se mueve al aparcar en pendiente, incluso con el freno activado.
- Sientes poca resistencia al tirar del freno.
- Quizá no pases la ITV si el freno no se bloquea adecuadamente.
Herramientas necesarias
- Un juego de llaves o carraca (normalmente 10 u 11 mm).
- Destornillador plano (en algunos modelos).
- Linterna o luz portátil.
- Guantes (opcional, pero recomendable).
Paso a paso: cómo tensar el freno de mano tú mismo
1. Localiza el tornillo de ajuste
En la mayoría de los coches, está bajo la consola central, justo donde se ubica la base de la palanca del freno de mano. A veces hay que retirar una funda de goma o levantar una pequeña tapa. Para retirar esto te recomendamos un destornillador de plástico o palancas diseñadas para retirar plásticos del guarnecido interior, así evitarás dañarlos.
2. Tira del freno de mano 1 o 2 clics
Esto es importante para dejar el sistema ligeramente activado y evitar un ajuste excesivo.

3. Ajusta el tornillo de tensión
Gira el tornillo en sentido horario (a la derecha) para tensar. Hazlo poco a poco y ve comprobando el recorrido de la palanca. No debe quedar demasiado duro: busca un punto intermedio entre firme y funcional.
4. Comprueba el bloqueo de las ruedas traseras
Con el freno de mano echado, intenta mover el coche (con cuidado, en llano y sin arrancar). Si las ruedas están bloqueadas correctamente, el trabajo está hecho.
5. Vuelve a montar la tapa o funda
Una vez ajustado, coloca de nuevo todos los elementos que hayas retirado y asegúrate de que la palanca se mueve con normalidad.
¿Y si no mejora tras tensarlo?

Si el recorrido sigue siendo largo o el coche sigue sin quedarse fijo, puede que el problema esté en las zapatas de freno (si los frenos traseros no son de disco), pastillas traseras (si son frenos de disco) o en el propio cable, que puede estar dañado o gripado. En ese caso, si no quieres comprobar el estado de los frenos (pastillas, discos y pistones) te recomendamos acudir a un taller.
Si quieres mantener el freno de mano en perfecto estado o vives en una zona con pendiente en la que es importante que este sistema funcione como debería, te recomendamos comprobarlo al menos una o dos veces al año. De esta forma te asegurarás que el vehículo se mantiene donde lo aparcaste sin correr ningún otro riesgo.
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