El proyecto “MINI for the Oceans” está logrando resultados mejores de los esperados, al haber extraído y reciclado hasta la fecha 2.000 kg de plásticos del Mediterráneo.
A pesar de los grandes avances, aún queda camino por recorrer. Y es que, bajo la premisa de eliminar 1 kg de residuos y desechos plásticos en el Mar Mediterráneo por cada compra de un MINI, el objetivo final es retirar 10.000 kg de plástico del fondo del mar.
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La iniciativa ha surgido tras un acuerdo con Gravity Wave, empresa que está totalmente entregada en la limpieza del Mediterráneo de residuos plásticos. Carlos Martínez, director de Mini, nos ha contado que el objetivo final de este acuerdo es convertir todo estos materiales altamente contaminantes en objetos de valor como soportes para teléfonos, bancos y mobiliario urbano ya que según nos dice “Mini es una marca muy urbana”.
Gravity Wave es una empresa social, de economía circular y de concienciación medioambiental, impulsada por solucionar uno de los mayores desafíos de la humanidad: la contaminación plástica de mares y océanos. Nos cuenta Julen Rodríguez, CEO de Gravity, que “limpiamos el plástico del fondo marino y los transformamos en productos de diseño con larga vida útil y alto valor sostenible, a través de un proceso de economía circular. Además, prevenimos que el plástico que todavía se genera termine nuevamente en las aguas. ”Sabemos que solos no podemos hacerlo. Por ello, colaboramos con pescadores, personas, empresas y entidades a través del movimiento #Plasticfreeoceans.
Mini es una de las marcas más preocupadas e implicadas en los temas medioambientales. Carlos Martínez ha vuelto a recordarnos que a partir e 2030 Mini será una marca 100% eléctrica y que están haciendo un gran esfuerzo para que la fabricación de coches sea neutral en emisiones.
