Con este modelo la marca francesa vuelve al Campeonato del Mundo. El diseño es mucho más espectacular y la potencia se ha aumentado hasta los 380 CV.
En la temporada de 2017 la reglamentación del Mundial de Rallyes cambiará y el primero que se ha presentado de los participantes es el Citroën C3 WRC. La marca francesa vuelve al campeonato tras tomarse un año “sabático” y dejando a DS centrada en la Fórmula E.
Durante este año de preparación desde Citroën se han encargado de ir creando expectación con distintas sesiones de fotos y vídeos y la forma la pudimos intuir tras la presentación del Citroën C3 de calle, pero el resultado es todavía mejor. Es verdad todavía son imágenes por ordenador, pero la apariencia es asombrosa.

Lo primero no busques los airbumps, en competición no valdrían de nada. Ahora empieza a ensanchar en pasos de rueda, colocamos un parachoques poderoso, toma de aire en el techo y en las puertas, un difusor, alargamos el chasis 55 mm y un gran alerón. El resultado es el WRC.
Todo esto ha sido posible porque la reglamentación de la próxima temporada es mucho más permisiva en el tema de la aerodinámica, ya que desde la organización se buscaba que los coches fueran mucho más espectaculares. Aún así vuelvo a repetir que se trata de una versión inicial, como lo será la versión que veremos en el Salón de París 2016 y que probablemente sufra algún tipo de modificación de cara al Rally de Montecarlo 2017.

Otras modificaciones a tener en cuenta en el nuevo Citroën C3 WRC es que la potencia disponible es de 380 CV, se amplía la brida del turbo a 36 mm, se permite disminuir el peso total del coche en 25 kg y se incorpora un diferencial controlado electrónicamente.