Si notas ciertas vibraciones en el coche que antes no estaban, tu coche te está diciendo que hay algo que no está bien. No es grave y podrás circular, pero debes cortarlo de raíz para evitar más problemas.

Viaje por autovía. Tu coche va estupendamente, pero cuando superas cierta velocidad, en torno a los 100 km/h, notas una vibración que hace meses o años, cuando tu coche estaba más nuevo, no tenía. ¿Por qué vibra? Los motivos pueden ser varios.
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La solución y su coste depende, como es evidente, del problema. Se puede arreglar con una simple revisión, aunque también es posible que este síntoma sea producido por un problema de mayor envergadura, ya que la vibración puede proceder desde una mal pisada del neumático hasta de un fallo del motor.

Neumáticos: revisa el estado de tus neumáticos. Si la pisada de estos es desigual, notarás que su desgaste no es uniforme. Esto es producido por un deficiente o excesivo hinchado, aunque también se puede producir por un desperfecto relacionado con el paso del tiempo.
Dirección: el hinchado de los neumáticos es tan importante como tener la dirección equilibrada, precisamente para evitar que los neumáticos se desgasten de forma irregular y provoquen vibraciones inesperadas. Los consumos y el envejecimiento del neumático también aumentarán, así que es algo muy importante a tener en cuenta.

Suspensión: el más estado de los amortiguadores pueden tener como consecuencia vibraciones a altas velocidades, ya que estos no actúan con la eficacia que deberían. En este caso, habría que cambiar los cuatro para viajar con confort y seguridad.
Frenos: otro punto a tener en cuenta si notamos vibraciones en el coche a cierta velocidad. Esto sucede porque los discos de freno presentan alguna ligera deformación y no está completamente planos. Para ello, revisa las pastillas con frecuencia, ya que un desgaste elevado puede producir deformaciones inesperadas.

Motor: si has revisado todo lo demás y el problema persiste, toca meterse en las tripas del coche. Porque el motor puede ser el culpable, ya sea por un problema de bujías o una falta de aire.
Aunque lo ideal es que si esto sucede, lleves el coche a tu taller especializado para que te haga una revisión del coche y analice qué es lo que sucede y la ubicación del problema.