Analizamos las diferencias principales en el rendimiento y prestaciones de los motores de combustión y eléctricos

En el continuo debate sobre la elección entre motores de combustión interna y eléctricos sigue siendo un tema candente. Ambas tecnologías ofrecen ventajas y desventajas, y entender las diferencias en rendimiento y prestaciones es crucial para tomar decisiones informadas al seleccionar un vehículo. En este artículo de Auto10 vamos a fijarnos en el rendimiento general, examinando las diferencias fundamentales en rendimiento y prestaciones para brindar claridad a esta decisión crucial. También tenemos un ejemplo de dos SUV que cuestan casi exactamente lo mismo, pero ofrecen capacidades y rendimientos muy diferentes siendo de gasolina y eléctrico: el Seat Arona, con etiqueta “C” de la DGT, y el MG ZS EV, que tiene etiqueta “0”.
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Aspectos generales de Motores de Combustión y Eléctricos
Los motores de combustión interna han sido la columna vertebral de la industria automotriz durante décadas. Utilizan combustibles fósiles como gasolina o diésel para generar energía a través de la combustión. Este proceso impulsa el pistón y, finalmente, las ruedas del vehículo. Los motores de combustión ofrecen un rendimiento probado en términos de autonomía y velocidad de recarga rápida en estaciones de servicio.
En contraste, los motores eléctricos operan mediante la energía almacenada en baterías. Estos motores han ganado terreno gracias a su eficiencia, bajo mantenimiento y cero emisiones directas. El rendimiento instantáneo de los motores eléctricos proporciona una aceleración suave y silenciosa, destacando en entornos urbanos y trayectos cortos.

Rendimiento de Motores de Combustión y Eléctricos
Motor de Combustión: Los motores de combustión interna, alimentados por combustibles fósiles como gasolina o diésel, logran eficiencias que oscilan entre el 40% y el 45% en modelos de última generación. No obstante, una porción sustancial de la energía se disipa en forma de calor, y la emisión de gases y partículas contaminantes es una consecuencia intrínseca.
Motor Eléctrico: Por otro lado, los motores eléctricos, impulsados por baterías recargables, exhiben eficiencias superiores al 90%. La ausencia de engranajes y las pérdidas mínimas en forma de calor contribuyen a este rendimiento excepcional.
Prestaciones de Motores de Combustión y Eléctricos
Motor de Combustión: Los vehículos equipados con motores de combustión se caracterizan por sus velocidades máximas elevadas, propulsadas por el tipo de motor y cajas de cambio con múltiples relaciones.
Motor Eléctrico: En el ámbito eléctrico, la aceleración se erige como un punto destacado. Los vehículos eléctricos ofrecen una respuesta rápida y suave gracias al alto par de torsión proporcionado desde casi cero revoluciones, disminuyendo a medida que alcanzan RPM más elevadas.

Autonomía y Recarga
Un aspecto clave de la comparativa es la autonomía. Los vehículos eléctricos han mejorado significativamente en este aspecto, superando las barreras anteriores. Sin embargo, los motores de combustión aún mantienen una ventaja en términos de alcance y velocidad de recarga. La infraestructura de estaciones de servicio es más amplia, lo que permite viajes largos sin las limitaciones actuales de las recargas eléctricas.
Sostenibilidad Ambiental
El enfoque ambiental se inclina claramente hacia los motores eléctricos, ya que no emiten gases de escape contaminantes. Sin embargo, la producción y disposición de las baterías plantean desafíos medioambientales propios. La transición hacia baterías más sostenibles es un paso crucial para equilibrar el impacto ecológico.
Costos y Mantenimiento
Los costos iniciales de los vehículos eléctricos tienden a ser más altos, pero los propietarios a menudo disfrutan de costos operativos y de mantenimiento más bajos a lo largo del tiempo. Los motores de combustión, aunque más asequibles al principio, pueden incurrir en mayores gastos a largo plazo debido a los precios fluctuantes del combustible y los costos de mantenimiento.

Dos ejemplos de coches parecidos con rendimientos diferentes
El MG ZS EV es un SUV compacto eléctrico que tiene un motor con una potencia máxima de 177 CV y 280 Nm de par máximo. Con 4,3 metros de longitud, parte de unos 31.480 € con una autonomía homologada de 350 kms. La aceleración de 0 a 100 km/h es de 8,6 segundos y la velocidad máxima es de 175 km/h.
Por otro lado, el Seat Arona 1.5 TSI es un SUV urbano de 4,1 metros de longitud y, por lo tanto, es más pequeño. Con motor de combustión a gasolina, hay una versión disponible desde unos 31.450 € que tiene una potencia máxima de 150 CV entre 5.000 y 6.000 rpm. El par máximo es de 250 Nm entre 1500 - 3500 rpm. La aceleración de 0 a 100 km/h es de 8,2 segundos y la velocidad máxima es de 210 km/h. Aunque es menos potente que el MG, acelera mejor por su menor peso. Por otra parte, su autonomía ronda los 700 kilómetros y puedes repostar los 40 litros de su depósito de combustible en unos 4 minutos.
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