La Federación Francesa del Vehículo de Época ha salvado a los coches clásicos de ser desterrados de París. Un acuerdo con el Ayuntamiento parisino los permite circular a pesar de la prohibición que ha entrado en vigor este mes.

No se puede decir que París sea una de las capitales más contaminadas del mundo, pero los franceses siempre han sido pioneros en la toma de medidas ecológicas para el confort del ciudadano. Desde el primero de julio, una ordenanza del Ayuntamiento prohíbe circular a todos los vehículos matriculados antes de enero de 1997 por las calles del centro.
Concretamente deberán salir de la zona interior del Boulevard Périphérique (la Periférica) todos los coches con más de 20 años si no quieren ser multados.

Los motores diésel, demonizados
La justificación pública de tal medida se basa en el elevado número de motores diésel de antigua generación que se mueven por la capital francesa y que -a estas alturas- han descubierto que son altamente contaminantes debido a sus emisiones de partículas y de óxido de nitrógeno. Pero con ellos se iban también los motores de gasolina... ¡y todos los clásicos!
La Federación Francesa del Vehículo de Época (FFVE), dependiente del organismo internacional FIVA, ha tomado cartas en el asunto hace meses y negociado con el Consistorio de París una solución para la minoría de vehículos clásicos. Como Francia no es España y los políticos siempre han tenido más cultura y sensibilidad para las artes, las negociaciones han llegado a buen fin.

Los Clásicos, excluidos
El acuerdo firmado permite saltarse la limitación a todos aquellos vehículos de dos y cuatro ruedas con más de 30 años (hasta fin de 1986)que porten el distintivo de la "Carte Gris" que expide la FFVE. Una pegatina en el parabrisas identificará a estos clásicos de colección, librándoles de multas por circular por el centro.
Evidentemente, el control de este contingente de vehículos lo llevará la FFVE, que ya expedía anteriormente "Cartes Grises" como identificación, a los coches y motos coleccionables. Este organismo deberá responsabilizarse de la identificación correcta de dichos vehículos y que no se "cuelen" los que no están en buen estado o no son coleccionables.

Los "Youngtimers" no se libran
Por supuesto, los apodados "Youngtimers" (coches viejos que no alcanzan los 30 años) en principio no están incluidos en el paquete, así como todos los demás matriculados entre 1986 y 1996.
Nuestra FEVA -organismo equivalente- debería comenzar a moverse para evitar males mayores el día no muy lejano que los ediles "progresistas" de Madrid o Barcelona decidan tomar medidas similares simplemente para obtener votos. No tendrán la misma sensibilidad que los franceses.

De sol a sol
Medidas similares se han tomado en otras grandes urbes hace años, como Berlín o Londres. En el caso de París la prohibición se extiende de lunes a viernes de 8 de la mañana a 8 de la tarde y la intención es desterrar de la capital el diez por ciento de los coches más contaminantes.
Este es sólo el primer paso: en 2020, en apenas cuatro años, la prohibición afectará a todos los modelos anteriores a 2011, promocionando la renovación del parque automovilístico a modelos bajo norma Euro5 y Euro6, eléctricos e híbridos.

Pero los clásicos de más de 30 años seguirán teniendo derecho a rodar por las calles de París.