Historia Skoda RS: siglas que potencian cada día más la imagen deportiva de la marca

En los últimos años las ventas de versiones deportivas han crecido en Skoda, representando ya un 25% de su cuota.

Que la mayoría de las marcas cuenten en sus gamas con acabados o modelos más deportivos nos da una idea de la importancia que tienen. En el caso de Skoda se apoyan en dos pilares. Por un lado está su desempeño en competición y por otro una gama asentada sobre las siglas RS, pero acompañada por otros equipamientos del mismo espíritu que cada vez tienen más impacto en las ventas del fabricante checo.

La historia de Skoda RS

Para entender el aumento de las ventas de las versiones deportivas en la gama Skoda nos remontaremos a sus inicios. En concreto fue en 1974 cuando apareció el primer modelo con las siglas RS, siendo en concreto el Skoda 180 RS. Pero en aquel momento sólo se trataba de unidades destinadas para la competición.

No sería hasta el 2001 cuando de verdad entran las siglas RS en la gama de Skoda en sus coches de calle. La firma ya llevaba unos años asentada dentro del Grupo Volkswagen y quería empezar a destacar algo más. Lo hizo a través del Skoda Octavia RS, que por aquel entonces montaba un motor 1.8 Turbo de 179 CV. Dos años más tarde aparecería un Skoda Fabia RS (en su segunda generación), mucho más modesto con su 1.9 TDI de 131 CV.

A partir de ese momento tan solo el Skoda Octavia se mantuvo a lo largo de los años como único integrante de los RS. Hasta que en 2018 se decidió dar paso al Skoda Kodiaq RS, que se convertiría en la primera opción deportiva de la marca en formato SUV. Todo ello para dar paso en 2022 al Skoda Enyaq RS, que cambiaba la parte roja del logo específico de estos modelos para dar paso al verde.

Actualmente estos modelos RS tan especiales de Skoda se ven acompañados de otros acabados deportivos, que terminan por englobar a todos los modelos de la marca. Podríamos empezar por los Monte Carlo que encontramos en los Skoda Fabia, Skoda Kamiq y Skoda Scala, a los que se suman los Sportline en Skoda Karoq, Skoda Superb, Skoda Kodiaq, Skoda Octavia y Skoda Enyaq.

Tal despliegue ha provocado que las ventas de estas versiones deportivas de Skoda se hayan disparado. Los responsables de la marca nos comentaron que mientras que en 2013 apenas representaban 110 unidades o un 1% en porcentaje, en este 2023 ya se han vendido 5.700 unidades, lo que significa ya un 25% del total.

Y el objetivo de Skoda no se para aquí, pues para el próximo año se ha confirmado la llegada del Skoda Elroq, que veremos qué acabado deportivo le asignan.