La firma británica ha contado con muchos especialistas para montar los mejores componentes disponibles. El objetivo es hacer que el Lotus Emira GT4 coseche grandes éxitos en las carreras.

El Lotus Emira tendrá una variante exclusiva para circuitos. Este coche, denominado Lotus Emira GT4, llegará a finales de año y para su desarrollo se ha partido, directamente, del coche de producción serie. Para llevar a cabo este proyecto, la firma británica ha trabajado con RML Group, compañía especializada en preparar coche para la competición.
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Como os podréis imaginar, por su finalidad y precio, habrá muy pocos Lotus Emira GT4. Aunque la marca no ha cifrado la cantidad de coches que producirá, sí se sabe que la partida inicial, a lo largo de 2022, será menor que la cosecha de 2023.
En Lotus han logrado, gracias al trabajo de sus ingenieros, reducir el peso de su Emira, que ya de por sí es bajo (1.405 kg) hasta los 1.260 kg. Una ‘operación bikini’ que le permitirá mejorar su rendimiento en circuito. Todo ello sin cambiar el chasis, producido en aluminio, ni su carrocería monocasco.

Donde sí vemos el trabajo de los ingenieros es en la mejora de la carga aerodinámica del coche, gracias al difusor delantero, de aspecto más racing o el alerón trasero, digno de todo buen modelo de carreras. Otros detalles como las entradas de aire o la rejilla frontal son importantes para mejorar su resistencia al viento.
Todo ello para mejorar el comportamiento del motor V6 de 3,5 litros y 400 CV que da vida al Lotus Emira GT4. Un bloque desarrollado por Toyota que envía toda su potencia al eje trasero. Con el objetivo de adaptarse a cualquier modalidad de carrera, la firma le ha instalado un enorme tanque de gasolina de 98 litros. Esto permitirá gestionar mejor el combustible a los equipos.
El cambio escogido para acompañar a este motor es propiedad de xTRAC. Cuenta con seis velocidades, monta levas en el volante y tiene un diferencia trasero de deslizamiento limitado.

A la hora de hablar sobre ‘lo que no se ve’, observamos cómo han cambiado muchos detalles. Para ello, Lotus ha contado con especialistas de cada materia para lograr un rendimiento óptimo. El juego de suspensión está firmado por Öhlins, mientras que los frenos son de Alcon. Cuenta con barras estabilizadoras específicas y un ABS de Bosch Motorsport que ha sido desarrollado en exclusiva para modelos de competición. Para los neumáticos, la firma británica ha escogido a Pirelli y sus GT4 de carreras.
Todo ello con una estética impresionante que hará que el Lotus Emira GT4 sea uno de los coches en los que más espectadores posen sus ojos. Con su acabado en verde, algo propio de una marca británica, rinde homenaje al enorme legado que poseen Lotus y Gran Bretaña en el mundo de la competición.
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