Nuevo Ford Escort RS MK1: Leyenda de rally por la que tendrás que pedir un buen préstamo

La empresa Boreham Motors rescata el Ford Escort RS MK1 cincuenta años después a través de una serie limitada de 150 unidades para todo el mundo.

Los aficionados piden clásicos y las marcas en ocasiones responden. No hay ninguna duda de que el Ford Escort RS MK1 es un auténtico hito de la competición y del mundo del motor desde hace más de 50 años. Ahora la empresa Boreham Motors con sede en Essex, Inglaterra ha decidido traer de vuelta el mítico Escort RS MK1 bajo una corta producción limitada a 150 unidades para todo el mundo. De hecho ya aceptan solicitudes aunque, no es barato.

El Ford Escort RS MK1: Nacido para competir

El Ford Escort fue un pequeño compacto (berlina, familiar o coupé) que la marca del óvalo comenzó a fabricar en 1967 para el mercado europeo. Se mantuvo a la venta hasta finales de los años 90 momento en el que fue sustituido por el Ford Focus. Desde entonces la unión entre la competición y Ford se convirtió en algo inseparable. 

El RS MK1 se ganó una buena reputación gracias a un rendimiento fantástico para atravesar tierra y barro en las competiciones del viejo continente. Más tarde le siguieron el Ford Escort RS Turbo y el más conocido Ford Escort RS Cosworth. Todos ellos se convirtieron en clásicos instantáneos y es ahora cuando Boreham Motors, con el “ok” de Ford, trae de vuelta el Ford Escort RS MK1.

No es un 'restomod' es un 'Continumod'

En los restomod los fabricantes aprovechan para acoplar nuevas tecnologías a una carrocería que respeta la identidad estética de un modelo. Y sí, con nuevas tecnologías nos referimos a motores eléctricos como el Opel Manta GSE, el Renault 5 Turbo 3E o el Renault R17 Restomod pero el del Escort RS MK1 es un “caso aparte”.

El equipo de Boreham ha utilizado unidades nuevas con una numeración identificativa propia. No se trata de un proyecto creado a partir de un vehículo donante, en su lugar se emplean materiales modernos a través de un acuerdo con Ford y se hacen desde cero. Ellos lo llaman “Continumod”.

La carrocería es prácticamente idéntica a la del modelo original con sus pasos de rueda ensanchados, los faros delanteros y traseros cuadrados que ahora son de Led y las llantas de cuatro radios en 15 pulgadas y doble anchura típicas de la época. Tanto el capó como la tapa de maletero son de fibra de carbono y la carrocería se ha reforzado para mejorar la rigidez torsional respecto al diseño original.

¿Etiqueta?, ¿ZBE?, ¿Qué es eso?

En cuanto al bloque motor el cliente puede optar por dos opciones. La primera es una motorización de gasolina de 1.845 cc que entrega 185 CV de potencia, gestionada a través de una caja de cambios de cuatro velocidades. 

La segunda, para aquellos que buscan sensaciones auténticas es una alternativa 2,1 litros de alcanza los 300 CV de potencia. El conjunto pesa menos de 85 kg y “ve su línea roja” en el cuentarrevoluciones en 10.000 rpm. Incluye bielas de acero forjado, un cigüeñal de palanquilla, inyección de combustible avanzada, control electrónico del acelerador y un sistema de escape de titanio a medida. 

La caja de cambios pasa a ser de cinco velocidades y os recordamos que el vehículo cumple con las tolerancias modernas gracias a un exhaustivo estudio del chasis y la suspensión para cumplir con estándares actuales.

Como los hacían antes

El interior mantiene también la estética de su antecesor. Combina materiales como el cuero y alcántara en los asientos tipo bucket, el salpicadero y las puertas. El volante luce el espíritu del clásico y si parecen pocos detalles de forma opcional se ofrecen arneses de cuatro puntos, espacio de almacenamiento de casco de carreras en el compartimento trasero de carbono y una jaula antivuelco.

El chasis distribuye el peso en 55:45 (el objetivo fue lograr el peso en vacío de 800 kg) y tiene una geometría optimizada combinando puntales delanteros MacPherson con un eje flotante ligero trasero de aluminio y titanio. El diferencial de deslizamiento proporciona una conexión directa sin asistentes como el ABS o el control de tracción incluidos. Una experiencia lo más analógica posible.

El precio del Ford Escort RS MK1 arranca en 295.000 libras (355.643 euros) casi lo mismo que te costaría comprar dos Porsche 718 GT4 RS (180.709 euros) o cinco Ford Escort MK1 RS 2000 originales en perfecto estado de conservación en el mercado de segunda mano (70.000 euros aprox.). Cuenta con una garantía de 2 años o 20.000 millas (32.186 km), lo que antes ocurra. Si necesitabas una señal para estrenar un pedacito de la historia del automóvil, aquí está, el “nuevo” Ford Escort MK1 RS.