Cuando se forman balsas grandes de agua, contar con un buen neumático con tecnología puntera puede resultar vital.

Las balsas de agua en las carreteras son muy peligrosas ya que pueden provocar aquaplaning. Este es un fenómeno físico que ocurre cuando las ruedas del automóvil no se adhieren a la carretera a causa de la lluvia. Cuando esto sucede el conductor pierde el control sobre su vehículo. Hay que estar preparados para saber salir de esta situación y para ello contamos con toda la información de la mano de expertos de Michelin, por si en algún momento te encuentras en esta circunstancia.
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¿Qué es el aquaplaning?
Este fenómeno conocido como aquaplaning se produce cuando el neumático de tu coche no es capaz de evacuar el agua suficiente de la carretera a través de las acanaladuras que tienen en su dibujo. Por este motivo lo que sucede durante unos segundos, que pueden ser vitales, es que nuestro vehículo flota sobre una película de agua.

Quizás suena a ciencia ficción. Pero lo que de verdad ha ocurrido es que delante del neumático se ha formado una cuña de agua cuya presión es superior a la que ejerce la rueda, provocando la pérdida del contacto con el suelo. Seguirá girando sí, pero se pierde toda la capacidad de tracción.
¿Cómo evitar el aquaplaning?
1. Comprueba periódicamente la presión de los neumáticos
En resumidas cuentas, ajustar la presión de los neumáticos de acuerdo a las recomendaciones del fabricante del vehículo reduce exponencialmente el riesgo de perder el control, sobre todo con el suelo mojado.
2. No te olvides de la banda de rodadura
Relacionado con el punto anterior, dentro de las revisiones visuales que puedes realizar para mantener en buen estado tus neumáticos está la de controlar la profundidad de la banda de rodadura. La ley indica que no se puede circular por debajo de los 1,6 mm, cifra a partir la cual los neumáticos no podrán evacuar de una forma segura el agua que te encuentres en la carretera.

3. Adapta la velocidad
Cuando empiece a llover de forma intensa comprobarás que la visibilidad empieza a disminuir. También aumenta la distancia de frenado al mojarse el pavimento, por lo que siempre es más seguro circular más despacio. De esta manera, además estaremos reduciendo las posibilidades de sufrir aquaplaning.
4. Desconectar las ayudas
Los coches nuevos cada vez tienen más ayudas a la conducción que pueden llegar a dirigir el coche, como podría ser el crucero adaptativo. En estas circunstancias lo mejor es desactivarlas todas para tener el pleno control del vehículo.

5. Mirar lo más lejos que puedas
Gracias a esta acción podrás anticiparte a posibles frenazos de los coches que te anteceden y también localizar esos charcos grandes que puedan provocar aquaplaning.
¿Cómo solventar el aquaplaning?
Vamos a suponer que pese a los consejos anteriores terminas sufriendo aquaplaning. ¿Qué hacer en esos momentos? Puede resultar un poco baladí, pero lo primero es no ponerse nervioso y mantener la calma. Acto seguido vas a sujetar firmemente el volante para mantenerle recto y si tuvieras que hacer alguna corrección que sea de forma muy suave. De esta manera también puedes frenar.

En caso de realizar alguna de las últimas indicaciones más bruscamente se podría producir un derrape. ¿Qué hacer entonces? Tendríamos tres casos:
- En coches de tracción delantera lo mejor es desacelerar y girar la dirección en el sentido opuesto al derrape.
- Para los de propulsión trasera es mejor acelerar y girar de nuevo el volante en sentido opuesto al derrape.
- El último supuesto serían los de tracción total, que en este caso se aconseja seguir la dirección del derrape y una vez recuperada la tracción, cambiar a la contraria.
¿Por qué los neumáticos Michelin ayudan a evitar aquaplaning?
Otro gran aliado para poder combatir de la mejor manera el aquaplaning es la utilización de un buen neumático. Un ejemplo son los productos de Michelin, que gracias a la incorporación de tecnologías conocidas como Evergrip pueden proporcionar un agarre muy elevado en firmes mojados desde que son nuevos y hasta que llegan al límite legal de los 1,6 mm. De esta manera se consigue evacuar suficiente agua en condiciones de extrema lluvia. Además, los neumáticos Michelin mantienen sus prestaciones hasta el final de su vida útil.
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